PLANTAS VERSUS HUMANOS
DE SOLES A LAS SOMBRAS
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Portulaca o verdolaga-extremadamente resistente al sol. |
Mes de Julio, Agosto...Madrid.
42 grados a la sombra.
Te sienta fatal?
Te ahogas con el aire seco y ardiente?
Tus plantas también. Exactamente igual.
No comprendo cómo aún hay personas que no lo entienden. Si vives en el centro de España, no te fijes en lo que te aconsejan artículos de los que cultivan al sur o en el norte de país. No tiene nada que ver en absoluto el clima, ni las temperaturas y lo más principal: la humedad del ambiente.
Que Madrid por ejemplo (no me refiero a la sierra), carece de ella. Cuando hace muchísimo calor, la humedad se esfuma. No hay nada que mantenga mínimamente alguna planta, como pasa en el norte. Dichosos ellos! Ese verdor tan, tan, jugoso y vivo ...
Aquí debemos cuidar de la planta como si de un bebé se tratase, que una planta sufre como nosotros, tiene sed como nosotros...
Necesita algo de sombra... como nosotros. Y pasan hambre... y mucha.
Bignonia/ Campsis. |
Verbena; muy fuerte y aguanta estupendamente. |
Se llaman de sol, de sombra o semisombra.
Y aún así las llamadas de sol, algunas veces están mejor con algo de sombra.
Aptemia |
No son seres pensantes ... eso dicen. No sienten... comentan.
Bueno eso ya cada uno que piense lo que quiera.
Alissum |
Cuando no existía el ser humano, las plantas YA vivían en la tierra. Y cuando ya no queden humanos, serán las plantas las que seguirán existiendo.
Su floración no es más que intentar sobrevivir, tirar sus semillas, echar a volar en el aire. Nos gustan, nos encantan las flores de nuestras plantas. Curiosamente cuanto más sufren, más flor suelen echar, aunque ya se queden sin hojas. Es una forma hermosa de dejar herencia. De sobrevivir. De procrear. De dejar sus"hijos"
Pimientos con mucha sed. |
Semprevivum |
En las fotos de éste post están los ejemplares de más resistencia. De un aguante tremendo. Son solo unas poquitas, pero por experiencia he visto que están espectaculares al sol.
Carex |
Deschampsia |
Imperata Red Baron |
Proporcionan delicadeza con sus movimientos suaves y susurrantes. Aportan color, movimiento, texturas...
Combinaciones infinitas, sin reglas ni fronteras. En la naturaleza todo está permitido, puesto que es Ella la que manda.
Pero si quieres ese cachito de naturaleza en tu jardín, balcón o terraza, tienes que ayudarlas. Proporcionarles agua, alimento.. mimos y cariño.
Agradecidas por tu atención, su presencia te deleitará por mucho tiempo.
Gracias por leerme.
kataswit@gmail.com
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